Ambos trámites están relacionados con la compraventa de vehículos usados, pero cumplen funciones distintas: uno cambia la titularidad legal y el otro protege al vendedor ante posibles incumplimientos.
Cuando se vende un coche, no basta con entregar las llaves y firmar un contrato: es fundamental realizar correctamente los trámites ante Tráfico. La transferencia de titularidad y la notificación de venta son dos pasos distintos que conviene no confundir. Saber en qué consiste cada uno puede evitar problemas legales y administrativos en el futuro.
Dos conceptos que suelen confundirse son la transferencia de vehículo y la notificación de venta. Aunque ambos procesos están relacionados, tienen funciones y consecuencias jurídicas distintas. A continuación, explicamos en qué consiste cada uno y por qué es importante diferenciarlos.
¿Qué es la transferencia de un vehículo?
La transferencia es el trámite mediante el cual se cambia oficialmente la titularidad del vehículo en el Registro de la Dirección General de Tráfico (DGT). Esto implica que el comprador pasa a figurar como nuevo titular, asumiendo la propiedad y las responsabilidades asociadas (seguros, impuestos, sanciones, etc.).
Este procedimiento requiere:
- Contrato de compraventa o factura.
- DNI del comprador y vendedor.
- Justificante del pago del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (modelo 620 o 621).
- Permiso de circulación y ficha técnica del vehículo.
- Pago de la tasa de la DGT correspondiente.
La transferencia puede hacerse presencialmente en la Jefatura de Tráfico o de forma telemática a través de gestorías administrativas autorizadas, lo que agiliza considerablemente el proceso.
¿Qué es la notificación de venta?
La notificación de venta es un trámite voluntario que puede realizar el vendedor para informar a Tráfico de que ya no es responsable del vehículo a partir de una fecha concreta. Esta notificación no transfiere la propiedad, pero es una medida de protección para el vendedor si el comprador no realiza la transferencia en un plazo razonable.
Es recomendable cuando:
- El comprador se compromete a realizar la transferencia, pero el vendedor desea cubrirse ante posibles sanciones, impuestos o accidentes que puedan producirse después de la entrega del vehículo.
- Hay retrasos en el trámite por parte del comprador.
Al realizar la notificación, el vendedor acredita que ya no tiene posesión del vehículo, aunque legalmente la titularidad no cambia hasta que se complete la transferencia.
Diferencias clave
Concepto | Transferencia de Vehículo | Notificación de Venta |
---|---|---|
¿Es obligatoria? | Sí, para cambiar la titularidad | No, pero muy recomendable |
¿Quién la realiza? | Generalmente el comprador | El vendedor |
¿Qué efecto tiene? | Cambia la titularidad del vehículo | Informa a Tráfico de la venta |
¿Protege al vendedor? | Solo si el comprador la completa | Sí, desde el momento de notificación |
¿Registra al nuevo titular? | Sí | No |
Conclusión
La transferencia es el único procedimiento que transfiere legalmente la propiedad del vehículo. Por su parte, la notificación de venta es una herramienta útil para proteger al vendedor ante posibles incumplimientos por parte del comprador. En cualquier caso, lo ideal es que ambos trámites se realicen de manera conjunta y sin demoras.
En Gestoría Quintanilla recomendamos a nuestros clientes realizar ambas gestiones de forma segura, rápida y con asesoramiento profesional, evitando así complicaciones legales o administrativas posteriores.