El cobro de una herencia es un momento clave en la vida financiera de una persona, y sus implicaciones fiscales pueden generar dudas entre los contribuyentes. En España, la recepción de una herencia está sujeta al Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD), gestionado por las comunidades autónomas, y no se integra directamente en la base imponible del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Sin embargo, existen ciertas casuísticas que pueden influir en la declaración de la renta del beneficiario.
- Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD)
La herencia recibida se grava por el ISD, cuyo tipo impositivo varía según la comunidad autónoma de residencia del fallecido y el grado de parentesco entre el heredero y el causante. En general, los descendientes directos (hijos y nietos) cuentan con bonificaciones y reducciones significativas en muchas comunidades autónomas, mientras que otros parientes o personas sin relación directa pueden enfrentar una carga fiscal mayor.
- Repercusión en la Declaración de la Renta
Aunque la herencia en sí no tributa en el IRPF, hay varios aspectos que pueden afectar a la declaración de la renta del heredero:
- a) Rendimientos de bienes heredados
Si la herencia incluye bienes inmuebles, estos podrían generar rendimientos del capital inmobiliario sujetos a tributación en el IRPF si se alquilan. En ese caso, el arrendador deberá declarar los ingresos obtenidos y podrá deducirse ciertos gastos, como el IBI o los intereses de un posible préstamo vinculado al bien.
- b) Ganancias patrimoniales por la venta de bienes heredados
Si el heredero decide vender un inmueble u otro activo recibido en herencia, la operación generará una ganancia patrimonial en la base del ahorro del IRPF. Esta ganancia se calcula sobre la diferencia entre el valor de adquisición (valor fiscal otorgado en el ISD) y el precio de venta, pudiendo aplicar coeficientes reductores si el bien fue adquirido antes de 1995.
- c) Derechos hereditarios sobre activos financieros
Si la herencia incluye cuentas bancarias, acciones o fondos de inversión, su rendimiento también tributará en el IRPF. Los intereses generados por cuentas bancarias y los dividendos de acciones se incluyen en la base del ahorro y tributan entre el 19% y el 28%, según la cuantía total.
- d) Planes de pensiones y seguros de vida
En el caso de recibir un plan de pensiones, este tributa como rendimiento del trabajo en el IRPF cuando se rescata. Por otro lado, los seguros de vida tributan por el ISD, pero si el beneficiario es distinto del contratante, podrían estar sujetos también a tributación en el IRPF.
- Conclusión
Recibir una herencia no tiene un impacto directo en la declaración de la renta en cuanto al capital recibido, ya que este se grava mediante el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. No obstante, los ingresos generados por los bienes heredados y la posible venta de estos pueden afectar la carga fiscal del heredero en el IRPF.
Es recomendable analizar cada caso particular y, si es necesario, consultar con un asesor fiscal para optimizar la carga tributaria derivada de la herencia. Os recordamos que en Gestoría Quintanilla estamos para resolver tus dudas, llámanos sin compromiso.