La importancia de un buen asesor: invertir ahora para ahorrar después

 

La importancia de un buen asesor: invertir ahora para ahorrar después

 

El día a día de una pyme o de un autónomo se encuentra con los obstáculos e incertidumbres, especialmente en el entorno de administraciones permisos, licencias etc. Un mundo en la mayoría de los casos ajenos a la profesión que se ejerce y que no se le puede dedicar el tiempo necesario.

Hay es donde entra un buen asesoramiento donde entra la figura del asesor, esa asesoría que es la prolongación de la tarea diaria que son los que solucionan los trámites administrativos que son los que nos permiten cumplir la legalidad vigente y que la empresa se dedique a su labor a su cometido específico

Muchas veces consideramos la inversión en una asesoría como gasto cuando hay mejor inversión que la ayuda de un profesional que nos indique cómo realizar de forma correcta toda la gestión en materia fiscal, laboral o contable de la empresa. De esta manera, evitaremos errores especialmente en nuestras relaciones con las administraciones públicas, evitando las multas que pudiesen surgir por no cumplir con la legislación vigente en ese momento.

La pregunta de un autónomo o empresario siempre es la misma, ¿Cuánto me cuesta? Y la verdad es que no cuesta tanto y seguramente al final del ejercicio sale gratis

En definitiva, la inversión en un asesor supone un desembolso que permite un ahorro importante en costes posteriormente. En el mundo empresarial, además, donde el tiempo es cada vez más valioso, nos ayuda a dedicar la mayor parte de el mismo a lo que realmente nos importa: que nuestra empresa crezca.

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